El diputado provincial criticó a los malos representantes de la política y al gobierno nacional, por usar el ejemplo de los corruptos para limitar la actividad gremial. Afirmó que no hay que condenar a la política por los errores de una persona. Además, repudió el decreto 93/2018, que prohíbe que familiares de ministros, el presidente o el vice presidente puedan asumir a cargos públicos, ya que, considera que es más importante el mérito de un funcionario que la relación de parentesco. En este sentido afirmó: «creo que el verdadero debate tiene que ser si la persona que va a cumplir una función política, determinada por la voluntad popular, cuando llega a ese cargo cumple o no«. Asimismo, habló sobre el problema del narcotráfico en Rosario, de las diferencias con el Gobierno Nacional y sobre el futuro del Frente Progresista y su carrera.
