El ministro de Gobierno y Reforma del Estado insistió en que la cláusula gatillo garantiza la actualización de los salarios de los estatales santafesinos acorde a los índices inflacionarios. Y opinó que, en el plano nacional, la medida “está trayendo más problemas que soluciones”.
Luego del anuncio del gobierno nacional acerca del otorgamiento de un bono de cinco mil pesos para los trabajadores, la provincia ratificó que no se brindará ese beneficio. Tal como lo había expresado días atrás, Pablo Farías adujo hoy que la gestión de la Casa Gris mantiene “una política salarial que es muy superior –enfatizó– al otorgamiento de un bono. El bono significa que hay un desfasaje muy grande entre el sueldo de los trabajadores y el aumento inflacionario y es necesario entregar una suma fija por única vez, que no es remunerativa y que significa un paliativo”.
El ministro de Gobierno y Reforma del Estado –en contacto con los medios locales– insistió con la vigencia de la cláusula gatillo, la cual “significa para los trabajadores estatales de la provincia de Santa Fe que mes a mes se van incrementando sus salarios de acuerdo al índice inflacionario, no es necesario un bono”, postuló.
En ese orden, el funcionario opinó que en el plano nacional el mentado bono “está trayendo más problemas que soluciones; hay una gran discusión en el sector privado de cómo pagarlo, cómo absorberlo, de si va a pagar Ganancias o no y la si el propio Estado nacional va a pagar ese bono”. Al respecto, distinguió que Santa Fe “tiene saldada esa situación con el pago de la cláusula gatillo”.
